Paisajes impresionantes y personas que enamoran…
“Corazones andantes”…así definiría mi gran amiga Mayte a los irlandeses. Y en cierto modo tiene una gran parte de razón, Irlanda se caracteriza por paisajes impresionantes con verdes praderas pero lo que realmente te enamora de este país es su gente. Respecto a su capital, hay un montón de cosas qué hacer y qué ver en Dublín, así que ya veréis que 3 días más bien aprovechados.
Yo estuve viviendo 5 meses en esta ciudad, así que a ver si esta guía de viaje de Dublín hace justicia al gran cariño que tengo a esta ciudad.
Consejos para viajar a Dublín
Alojamiento en Dublín
Como os digo siempre que visito una ciudad, lo más importante al reservar tu alojamiento en Dublín es la ubicación. Hay muchos hoteles y lo mejor es que esté bien situado para moverte por la ciudad.
Hoteles recomendados en Dublin
Transporte
En Dublín, no vais a tener ningún problema para moveros andando, ya que no es demasiado grande y las distancias no son larguísimas. Sin embargo, cerquita de Dublín hay sitios muy chulos por lo que alquilar un coche puede ser una muy buena opción si tenéis algún día de más. ¡Sigue leyendo que más abajo te dejo algunas ideas!
¿Alquilar un coche para recorrer los alrededores de Dublín?
Si quieres recorrer los alrededores de Dublín una buena forma es hacerlo en tu propio coche, ¡alquílalo clicando en el siguiente enlace!
Día de llegada: Temple Bar
Ya estamos en Dublín! Y como habremos llegado por la tarde-noche, después de dejar nuestros “bártulos” en el hotel, nos iremos a vivir una de las cosas más populares de este país…los pubs irlandeses!
Para ello nos dirigiremos a Temple Bar, la zona de marcha por excelencia con muchísimo ambiente y encanto. Aquí la oferta tanto para comer como beber es casi infinita, por lo que pasear y elegir el que más os guste, pero eso sí, que no falte una cerveza Guinness para empezar nuestra aventura irlandesa. El pub más conocido que seguro que habremos visto en alguna foto es Temple Bar.
Día 1: Corazón de Dublín
¿Preparados para caminar y conocer lugares impresionantes? Hoy va a ser un gran día…
Comenzamos yendo a la famosa cárcel de Kilmainham, una lugar sobrecogedor en la que tras una visita guiada te enseñan un montón de cosas interesantes sobre la historia de Irlanda; en la cárcel se visita todo, celdas, capillas, patios…sin duda algo imprescindible de Dublín. Lo ideal llegar allí sobre las 10h de la mañana.
Desde allí, cerquita a tan sólo 15 minutos andando llegamos a la fábrica-museo de Guiness, con más de 200 años de historia y mil cosas curiosas que ofrecernos. Para terminar la visita, incluido con la entrada tenemos una consumición en su famoso Gravity Bar desde el que tendremos una panorámica muy bonita de Dublín.
Continuamos nuestro recorrido y en dirección hacia el centro de la ciudad nos encontramos con la Catedral Christchurch, y un poco más al sur la Catedral de San Patricio, el patrón de la ciudad por el que una vez al año se monta una juerga en Dublín difícil de igualar…(el 17 de Marzo). Estas son las dos iglesias más grandes de la ciudad y merecen la pena visitarlas.
Ya llevamos un buen “tute” turístico…ahora nos vamos al corazón de la ciudad para adentrarnos en la parte más comercial y transitada de Dublín, donde tendremos que hacer una pausa merecida y comer algo para recobrar fuerzas, no?
Para bajar la comida, recorreremos la calle comercial por excelencia de Dublín, Grafton Street. Es una vía peatonal bastante bonita repleta de tiendas y centros comerciales. En uno de sus extremos tenemos la estatua de Molly Malone, una mujer famosa con la que todo “buen turista” nos sacamos una foto…al otro extremo de Grafton, llegamos al que para mí es sin duda el parque más bonito de la ciudad, Saint Stephen’s Green; no dejéis de daros un paseo por él, es una pasada!
Ahora, que mejor idea que tomarse el mejor Capuccino de la Dublín en un bar muy especial? Apenas a 2 minutos desde Saint Stephen’s Green bajando por la calle Dawson Street llegamos al Cafe de París. Tomaros un descanso y disfrutad de este sitio…
A continuación, si seguimos bajando la calle llegaremos al Trinity College (que lo dejaremos para mañana), y cruzando el río Liffey aterrizamos en la calle principal de Dublín, O’Connell Street. Esta calle siempre está llena de gente y en ella encontramos el Spire (el “pincho” para los españoles…), un monumento que se construyó entre el año 2002-2003, y llamado monumento a la luz para reponer uno construido anteriormente destruido por el IRA. Es el lugar habitual de encuentro para todos los habitantes de Dublín.
Allí mismo tenemos una importante calle comercial, Henry’s Street, y por supuesto, el famoso Penny’s, un centro comercial enorme con precios baratísimos…preparaos para salir con unas cuantas bolsas…
Para terminar la tarde, la mejor opción es tomarse una buena Guiness en uno de los bares más peculiares de Dublín, The Church; una antigua iglesia reconvertida…
Y para rematar este gran día, esta noche nos vamos de espectáculo. Una ciudad caracterizada por la música en directo y nos lo vamos a perder?…claro que no! Es imprescindible reservar con algo de antelación y no es lo más barato pero sin duda que merece la pena…nos vamos a ir a cenar viendo un espectáculo de música y danza irlandesa…ya veréis que ambientazo se forma en este sitio…(pedir en la reserva que os den una mesa centrada..). Todo esto se lleva a cabo en el hotel Arlington, justo enfrente del río y a pocos metros del Ha’penny bridge, un famoso y bonito puente que tiene su propia historia…
Vaya día completito de nuestro viaje a Dublín, después de alguna que otra pinta estaremos deseando irnos a la cama.
Día 2: Trinity College y Merrion Square
Nos ponemos en marcha y lo primero que debemos hacer es coger fuerzas, y nada como un típico desayuno irlandés! Eso es capaz de hacer andar a un muerto.
Después nos vamos directamente al Trinity College, un símbolo de Dublín y una de las universidades más antiguas del mundo. Es muy bonita tanto por fuera como por dentro con sus grandes jardines, y algo destacable es su biblioteca…la de Harry Potter! Hay una visita guiada para recorrerla, merece la pena pero quizás algo cara…
Desde allí tomamos rumbo hacia uno de los parques con más ambiente de la ciudad, Merrion Square. En el interior de este parque (en uno de los extremos), se encuentra la famosa estatua de Oscar Wilde.
En otro de los extremos del parque está la casa número 29, un lugar interesante donde ver la forma de vida del antiguo Dublín (necesario para enterarse bien tener un buen nivel de inglés…). Allí cerca también nos encontramos el Museo de Historia, la Galería Nacional de Irlanda, la Biblioteca Nacional y el Museo Arqueológico, pero que vamos, a no ser que tengas un interés especial en alguno de ellos, no tiene nada especial.
Ya nos va quedando poco tiempo de nuestra escapada a Dublín y yo sinceramente, lo aprovecharía para quedarme en el centro de la ciudad por la zona de Temple Bar y O’Connell Street, ese carácter especial lleno de vida de los irlandeses hará que nunca nos cansemos de pasear y vivir experiencias nuevas con esta estupenda gente!
Para aquellos que dispongan de algunos días más, tanto Dublín como Irlanda ofrecen muchísimas más cosas interesantes, entre las que yo destacaría para hacer desde Dublín:
- Fenix Park: un parque inmenso en el que podemos encontrar hasta ciervos…
- Galway y Cliffs of Moher: esto es sencillamente espectacular! Hay excursiones en el día aunque es un poco paliza. Tenemos 3 horas de trayecto, pero lo que está claro que merece la pena. Si pudiésemos disponer de 3 ó 4 días lo ideal es ir en coche, y además aprovechar para recorrer, junto a Galway y sus Cliffs, un poco la Península de Conemara, una pasada!
- Belfast: cuánto hemos oído hablar de esta pequeña ciudad…pues aún nos sorprenderá más cuando la visitemos…lo ideal alquilar un “Black Taxi”, que son antiguos taxistas que se han reconvertido en fantásticos guías que te cuentan la historia de la ciudad de una forma más que interesante, y que además te llevan a lugares “prohibidos” que solo es posible acceder con ellos al lado…una experiencia increíble! Se puede ir y volver en el día.
- Wicklow: conocido como el jardín de Irlanda…
- Newgrange: Conjunto arqueológico más importante de Irlanda, para los amantes de las «piedras», una excursión que merece la pena.
- Pueblos de los alrededores: hay bonitos lugares en las afueras de Dublín con mucho encanto y muy bien comunicados con el tren; además, como casi nadie habla de ello parece que no existe pero…Dublín tiene playa! A pocos minutos en tren podremos conocerla, bañarnos ya será otra cosa.
En definitiva, un fin de semana perfecto en una ciudad en la que desde el primer momento nos sentiremos como en casa. ¿Habéis visto todo lo qué ver en Dublín en 3 días? 🙂
Y si habéis pillado el gustado y queréis seguir visitando más ciudades, aquí os dejo un enlace a las guías de viaje de algunas de las más importantes del mundo: Dubai, Ciudad de Panamá, Nueva York, Londres, Copenhague, Berlín, Sidney, Singapur, Amsterdam, Hong Kong, Estambul, y muchas más!
Algunos datos básicos sobre Dublín:
- Idioma: Inglés (el dialecto irlandés es poco utilizado)
- Moneda: Euro (€)
- Tipo de cambio: Consúltalo aquí
- Horario: UTC+0 (1 hora menos que en España)
- Vacunas: No es necesario ninguna vacuna.
- Documentación necesaria (residentes UE): Únicamente el dni o pasaporte en vigor.
- Clima: Esta es la parte «complicada» de este país…el tiempo en Dublín siempre llueve…pero ya lo dicen los irlandeses, si no te gusta el tiempo de Dublín espera 30 minutos que seguro que cambiará…porque eso es una máxima de esta ciudad, el tiempo es muy cambiante y en un mismo día podemos tener las cuatro estaciones del año…
- Datos de interés: Los enchufes son distintos al sistema español, por lo que recordar llevar un adaptador para nuestros aparatos electrónicos.
¡Me encanta esta guía! ¡y es que Dublín además es nuestra ciudad! Aquí no puede faltar nuestra historieta preferida sobre el Spire que siempre recordamos cuando vamos allí, y es que el plan era inaugurarlo en el año 2000 y llamarlo el Monumento al Milenio, pero se retrasaron tres añitos de nada (benditos irlandeses) y visto que el nombre ya no procedía, lo llamaron el Monumento a la Luz. Cuando lo inauguró, el alcalde de Dublín dijo que la generación actual de dublineses venía de parejas que habían quedado en sus primeras citas bajo el reloj de Eason, un precioso reloj de la famosa papelería de la calle O’Connell, y que desde ese momento, las nuevas generaciones de irlandeses nacerían de parejas que se darían cita en «el pincho», ¡y no podía tener más razón!
¡Mil besos!
May
Y a mi me encanta esta historia…cuántas veces la habré escuchado?…jaja..
Muchas gracias May, a ver si hacemos un «reminder» prontito…
Besitos!
Gran País, increíbles persona y una experiencia única. Que de recuerdos… I love Dublin.
Viaje perfecto para ir con amigos, familia, pareja…de todo para todos, ciudad única que no te defraudará.
P.D : Cuidado con los pasos de cebra!! Mirar al suelo por si tenemos dudas de la dirección jijijiji
Grande Cheche! que te digan a tí si no es divertido este país…habrá que hacer un «remember» prontito!
Un abrazo!
De hecho, Dublín es una ciudad vibrante, dinámico y la gente es amable. Un artículo estupendo, felicitaciones!
Sin duda! Muchas gracias por vuestras palabras. Un abrazo y a seguir viajando!
Hola!
Leí tu post antes de viajar allí y, tras visitarlo, comparto tus impresiones 🙂
Gracias por el comentario Marta. Lamentablemente no se permiten enlaces externos en los comentarios, pero nombro a tu blog para que la gente pueda completar la información: ysifly.com.
Un abrazo!
Muchas gracias por compartir esta guía de viaje, me ha gustado mucho. Ya sé cual es mi próximo destino, saludos
Muchas gracias Andrés! Seguro que te va a encantar.
Un abrazo!